Cual salvaje juventud 
rompí mi almohada 
 esa   de plumas
saltando encima
    de las camas
 fuimos dejando el cuarto
     medio a oscuras...
me embriagan tus dos lunas
y este vaso medio lleno
que vacía mi vacío
 y de amor me deja pleno
podría beberte infinito
si el finito no existiese
flotando en esas dos pupilas
hasta que el cuerpo me pese
y  casi ahogándome
         en tu mar negro
llegar a tus cielos verdes
para  al final    de esta laguna
todo el olvido
recuerde
me embriagan tus dos lunas
me ahogan tus dos mares
en esta resaca sin lagunas
aún tengo sed por estos lares
donde todo me da vueltas
donde nadie me detiene,
ahora empieza mi revuelta...
donde este pobre 
                               todo tiene. 
 
  
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