Todas las mañanas,
me daba los buenos días,
sin palabras,
y todos los días,
hacía las mañanas diferentes,
sin café me despertaba,
pupilas dilatadas ,
sin drogas,
soñábamos,y entre sueño y sueño...
aveces nos dormíamos,
para volver a darnos los buenos días,
las conversaciones sin palabras,
las palabras sin conversación,
las mañanas sin café,
y solo tú en mi habitación.
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