En la palma de sus manos,
se leían libertades ,longevidad,
la linea de un futuro rebelde,
el amor,tan eterno,como su universo,
se leían sus líneas, como pentagramas,
las notas que marcaban su tiempo,
la melodía de una vida.
En su palma, su destino,
a veces la incertidumbre,
una pelea infinita contra sus miedos,
la carga de sus palabras,
y el peso de sus hechos...
Pero solo sentía el poder de su rebeldía,
cuando cerraba el puño,
cuando lo cerraba con toda su fuerza,
y lo alzaba gritando....libertad.
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